TRAS LAS HUELLAS DE UN REFUGIO ANTIAÉREO DE LA GUERRA CIVIL EN VILLENA. RESULTADOS DE LA PROSPECCIÓN GEOFÍSICA EN LA CALLE MENÉNDEZ PELAYO Y ADYACENTES.

Los técnicos aconsejan continuar la investigación mediante la introducción de cámaras en el subsuelo que visibilicen la entidad de los restos registrados por el georradar.

El Departamento de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente de la Universidad de Alicante, presenta en el Ayuntamiento de Villena los resultados de la campaña de prospección geofísica efectuada en el mes de febrero por los especialistas, Juan Luis Soler Llorens y Nassim Benabdeloued, en la calle Menéndez Pelayo y adyacentes, en la que estuvo presente el Semap del Museo de Villena. El equipo de gobierno consideró de gran interés este proyecto, surgido a raíz del hallazgo casual, en el mes de mayo de 2022, de unas cavidades abovedadas en el subsuelo, con motivo del hundimiento de un tramo del vial al paso de un camión que se encontraba realizando obras municipales. Estas estructuras subterráneas fueron interpretadas, después de diversas hipótesis, como posible refugio antiaéreo. De su existencia da noticia el historiador local Cesar López Hurtado, en su obra Villena Roja 1936-1939. Represión de guerra y posguerra.

En el mes de febrero de 2023 los técnicos realizaron 118 perfiles -recorridos transversales y longitudinales- en las calles Menéndez Pelayo y Cervantes, que suman una longitud total de 1588 m, empleando antenas de 100 y 500 MHZ. El sistema de exploración utilizado se denomina GPR (Ground Penetrating Radar) o radar de penetración en el suelo, y se enmarca dentro de las técnicas de prospección electromagnéticas. Es capaz, en función de las frecuencias de trabajo utilizadas, de resolver diferentes problemas de ingeniería, arqueología y geotecnia que van desde la inspección y valoración de un firme, hasta la delimitación de contactos litológicos o la detección de posibles restos arqueológicos.

Los datos de los radargramas obtenidos reflejan una serie de anomalías, algunas de ellas con forma de bóveda, entre las que destacan dos grupos correlacionados, unidos mediante una línea que delimita la posible existencia de una estructura en el subsuelo. No obstante, las prospecciones en suelo urbano son complejas, por lo que los profesionales aconsejan la ejecución de perforaciones superficiales e introducción de cámaras en los tramos de mayor concentración de anomalías, con el fin de comprobar la existencia de restos arquitectónicos y su relación con el refugio antiaéreo de la guerra civil que menciona el investigador Cesar López en su obra.

El equipo de gobierno apoya el desarrollo de la investigación y continua impulsando los trabajos necesarios para verificar la presencia y conocer el estado de conservación de la construcción subterránea.

Luz Pérez Amorós
Técnica Arqueóloga
Servicio Municipal de Arqueología y Patrimonio
Museo de Villena